“Por san Martiño faise o magosto con castañas asadas e viño ou mosto”, dice el refrán. Y en Ourense lo siguen estrictamente. En su origen, el magosto era una fiesta en torno al fuego y las castañas asadas con la que los gallegos honraban las cosechas. El fuego en las frías noches de primeros de noviembre invitaba a compartir cuentos y leyendas antiguas. La noche es también el escenario de los magostos de las cuadrillas, que hacían fuego al aire libre y entre castañas, chorizos asados, vino tinto nuevo, canciones y cuentos continuaban una tradición cuyos elementos, incluida la queimada final, son símbolos de vida y purificadores. El carácter diferencial y el arraigo del magosto de Ourense, que tiene lugar con motivo de la festividad de San Martín de Tours (patrón de la ciudad) lo convirtió en 2008 en fiesta de interés turístico de Galicia. El crepitar de las castañas suena en toda la ciudad, ya que la fiesta, popular y espontánea, se celebra en distintos barrios, en el parque de la Alameda y en los montes que la circundan.